A la hora de acometer una reforma de hogar, muchas personas se plantean unificar espacios, para lo que se necesita tirar alguna pared. Seguramente te habrás preguntado en alguna ocasión cómo quedaría tu casa si tiras una pared, pero… ¿cómo saber cuáles se pueden tirar en una reforma del hogar?

Qué paredes se pueden tirar en una reforma del hogar

Un factor a tener en cuenta es ver cuál es el grosor de la pared que se quiere derribar. Si se tiene una puerta en esa pared se puede medir la anchura de la pared. En caso de que sea inferior a 15 centímetros, es muy probable que se trate de un tabique, lo que permitirá que sea derribado dado que no cuenta con carácter estructural.

Si la pared que queremos tirar no tiene una abertura y no podemos saber cuánto mide su grosor, se puede usar una maza de plástico o de goma. Golpearemos la pared y si el ruido es muy sonoro y hueco, podemos decir que se trata de un tabique, pero si es un sonido sordo y seco, es posible que nos encontremos con un muro de carga.

Estos muros no pueden ser derribados y si se hace, se recomienda contar con apoyos estructurales, para lo que hace falta un arquitecto superior, un técnico y un equipo de obras profesional que pueda acometer esta clase de obra.

Siempre que se trate de un muro de carga, y dado que no se trata de una obra sencilla, se debe contar con un arquitecto o un técnico para que, primero valoren el alcance que puede llegar a tener la reforma, después hay que hacer un estudio de cargas así como de los detalles constructivos y ver si el proyecto es viable. En caso de ser afirmativo, debe legalizarse en el Ayuntamiento antes de ponerse manos a la obra.